Ñoquis salteados con bimi y queso de cabra

Una bolsita de ñoquis listos para preparar en la nevera siempre es una alternativa estupenda para resolver de manera rápida y deliciosa cualquier almuerzo o cena. Sin duda, y si me preguntáis, siempre optaré por hacer la masa casera de ñoquis en casa pues en realidad sólo con una buena patata, un poco de harina y delicadeza y paciencia se pueden lograr unas almohadillas de textura sedosa casi como de una nube se tratase y con un sabor más marcado al tubérculo; algo que con los que compramos generalmente no se llega a conseguir ya que cuentan con una mayor cantidad de harina que los hace más firmes y así más manejables. Aún así, y no siendo perfectos, esas bolsitas que se compran en casi todos los supermercados – mis favoritos son….. – se hierven apenas unos minutos en agua con sal y están listos para ser condimentados en recetas que no requieren excesiva preparación pero que pueden resultar en platos que se quieran repetir muchas veces como estos ñoquis salteados con bimi y ciruela amarilla.

“Una bolsita de ñoquis en la nevera puede resultar en una cena fácil, rapidísima y deliciosa como estos salteados con bimi y ciruela”

Los ñoquis, o gnocchi por si algún italiano nos está leyendo y se le están saliendo los ojos de la cara,  son unas suaves bolitas de patata que se preparan con salsas generalmente muy básicas y que incluso con un poco de mantequilla y salvia pueden ser deliciosos. Particularmente me gustan los que llevan salsa de quesos, que es muy típica, pero es verdad que por su morfología pueden tender a pesar y a aburrir y es por eso por lo que tiendo a elaborar siempre para ellos condimentos alegres y frescos con las verduras muy presentes; en esta ocasión también con unas ciruelas amarillas un poco verdes que rondaban por casa y que resultaron ideales salteadas con un poco de mantequilla igual que el bimi, los protagonistas de una receta en la que incorporé también unos daditos de queso de cabra, un poco de chalota y unas gotas de salsa jang de fruta que es uno de esos jugos que no pueden faltar en mi despensa porque te alegran y dan vida a cualquier salteado o guiso.

Una de las pautas más importantes para estos ñoquis con bimi y queso de cabra es sin duda darles la cocción óptima en abundante agua con sal hirviendo, sabréis que están listos cuando empiecen a subir a la superficie. Tendréis que tener para ese momento la salsa/condimiento ya preparado porque haremos como me enseñaron en Italia e incorporaremos los ñoquis directamente del cazo con una espumadera a la sartén para el salteado final. Aunque podéis utilizar aceite de oliva virgen extra, me gusta en ocasiones usar una base de mantequilla porque le da un dulzor final a la salsa y al conjunto, saltear en ella ligeramente la chalota, posteriormente añadir el bimi que habremos cocido 3 minutos en agua hirviendo con sal y por último las ciruelas amarillas hasta que se doren. Será ese el momento de agregar la jang sauce, también un poco de tomillo y los ñoquis ya cocidos, darle a todo un buen meneo y en los segundos finales incorporar unos poquitos – pocos de verdad – dados de queso de cabra. Servir al momento y disfrutar al máximo.

¡Vamos con la receta!