¡Carrámba qué anfitriona!: Consejos para conseguir una línea envidiable
Un buen anfitrión debe nutrirse de la mejor literatura para poder tener conversaciones interesantes con sus invitados e impresionarles con sus dotes oratorias. En cuestión de cocina no puede ser menos, su biblioteca debe abarcar todo tipo de recetas, de todo tipo de alimentos, de todo tipo de estilos y nacionalidades, de todo tipo, incluso como el que ocupa esta publicación.
Me gusta jactarme de mi biblioteca familiar, en especial de la sección de libros de cocina y guías de restaurantes, aunque hacía tiempo que no pensaba en esta joya que ha vuelto a caer en mis manos. Data de 1992 y su autora es la gran Raffaella Carrà. Conocida por programas memorables como “¡Hola Raffaella”! en España, aunque yo me quedo con el título de programa más creativo de todos los tiempos “¡Carrámba che Sorpresa!” de la Televisión italiana, que en España correspondía al “Sorpresa Sorpresa” de Isabel Gemio.
El colmo de la cuestión es que incluso me lo dedicó la misma Raffaella, y hasta ahora no me había parado a hojearlo detenidamente… y he encontrado perlas de sabiduría culinaria que debo compartir por el bien de la humanidad.
Este libro tiene como finalidad el de aconsejar a las comunes mortales a conseguir la envidiable forma física de la cantante y presentadora. La estructura del libro se basa en sus reflexiones, una sección de platos a base de Hidratos de carbono, platos que ella llama “comodín” y platos a base de proteínas, además de diferentes consejos sobre las mezclas de alimentos a evitar para mantener la línea.
En la primera sección reinan la pasta y la pizza, acompañadas por algunas sopas y ñoquis. Destacaría los Fusilli con nabos (el nabo, ese gran olvidado de la cocina diaria) y los Espaguetis “Pobres pero Buenos” con romero, aceite, ajo y guindilla, es decir, en cuestión de salsas para la pasta, la aportación de este libro no es el no va más que digamos. Son interesantes los Ñoquis al falso pesto, que sin ser nada del otro mundo nos ofrecen una versión light del pesto sin piñones ni queso parmesano. Como sopas destaco dos la “Antigua”, un potaje de achicoria, hinojos, apio y tomate, y el Gazpacho de Danilo, que es un gazpacho normal pero sin pan. Sin duda adelgazarás comiendo estas recetas, ya que de apetecibles tienen lo justo.
Las pizzas consisten en una base light sobre la cual hay que posicionar todo tipo de verduras: Espinacas (con un alarde de creatividad esta pizza se llama Popeye), achicoria, judías verdes, brécoles, calabacín, berenjenas y hasta el Festival del Huerto, es decir, todo junto. Aunque la que se lleva el premio es la Tortuga, a base de lechuga.
Los platos comodín consisten en crudités, menestras, potajes, cremas, verduras a la parrilla y revueltos. La única receta que me ha parecido digna de mención y que quiero probar es la calabaza picante (salteada con ajo y guindilla).
En la parte de las proteínas tampoco hay una gran innovación: solomillos y bistecs aromatizados, estofados con verduritas, aves en salsa y una receta que me inquieta, más por el nombre que por su sencilla composición: Huevos revueltos con una lincha de mozzarella fundida. Lo que desconcierta: se llaman Huevos Supermán.
Además de una dieta equilibrada Raffaella nos enseña, mediante fotos explicativas prácticando diferentes tipos de deportes como la canoa, que el ejercicio es el complemente indispensable de una dieta sana, como nos explican en Muévete.