Raclette de invierno
Lo que mejor nos puede sentar en días de frío intenso (aunque, al menos en España, y especialmente en Barcelona, no hace mucho frío) es un buen plato contundente: guisos, estofados, legumbres con sus sacramentos…
Pero hoy nos ocupamos de otra receta de invierno tradicional, la Raclette.
El raclette es un queso de origen suizo proveniente del cantón del Valais hecho a base de leche cruda de vaca y que normalmente se presenta en forma de gran rueda de unos 6 kg aproximadamente. Varios quesos de tipo raclette pasteurizado son fabricados en las regiones francesas de Saboya, Franco-Condado, Auvernia y Bretaña. Recientemente, se han creado variantes del raclette original: al vino blanco, ahumado, a la pimienta o a las hierbas.
Su período óptimo de degustación se extiende de noviembre a febrero, luego de una curación de tres a seis meses, aunque es excelente en cualquier época del año, aunque yo recomiendo no consumirlo en verano…
La raclette (en femenino) es un plato tradicional valaisano, que por su carácter sociable se ha extendido a muchos países. Tradicionalmente, se derretía el queso acercándolo a una fuente de calor como un horno o brasas. Hoy en día, es consumido entre amigos alrededor de una parrilla eléctrica llamada raclette. El queso se sirve fundido con patatas cocidas,con embutidos y pepinillos. En Suiza se come la raclette acompañada de una bebida caliente o de un vino blanco ligero como el Chasselas.
El queso Raclette obtuvo a finales de 2003 la distinción AOC en Suiza. Esta distinción limita la producción del raclette al territorio valaisano y fija unas cantidades precisas para su fabricación (cantidad y proporciones de los ingredientes). Esta AOC ha sido objeto de controversia en Suiza, pues una importante cantidad de quesos tipo raclette son producidos según otros métodos en otros cantones, aunque utilizando en cierto modo la fama del cantón para promocionarse.
En esta época solemos prepararlo a menudo, y es una excelente opción para disfrutar cuando se tienen invitados, como la fondue, ya que no da mucho trabajo al Buen Anfitrión.