Bacaladilla a la romana
Esta receta no tiene mucho misterio. Bacaladillas pasadas por harina y huevo batido y al aceite caliente. Sin más historia. Antes de pasar por el preparado de a la romana, pondremos sal, pimienta y ajo en polvo para dar un toque de sabor.
Las bacaladillas es un pescado de carne blanca, sin escamas, muy parecida en forma a las pijotas y muy económico.
Se limpian de manera muy sencilla, solo hay que retirar cabeza y tripas, no hay que hacer mucho más.
Un pescado que se recomienda comer recién frito para que siga con su toque crujiente.
Una verdadera delicia, ¿Te animas con estas bacaladillas a la romana? Pues toma nota que comenzamos.
- 1 kg de bacaladillas
- Sal
- Pimienta molida
- Ajo en polvo
- Aceite de oliva virgen extra
- Harina
- Huevos batidos
- Limpiamos las bacaladillas, retiramos las cabezas y las tripas. Tienen las bacaladillas una telita negra, esa también la quitamos, simplemente pasamos el dedo y sale sola.
- Ponemos las bacaladillas limpias en una fuente, ponemos sal, pimienta molida y ajo en polvo al gusto.
- Batimos los huevos.
- Ponemos la harina en un recipiente.
- Ponemos el aceite al fuego para que caliente.
- Ahora solo toca ir pasando las bacaladillas de una en una por la harina, sacudimos el exceso, pasamos por el huevo batido, que escurra el exceso y al aceite caliente.
- Freímos y pasamos a un papel absorbente.
- Servimos.