Pollo frito con ajo, limón y perejil
¿Quién le dice que no a una bandeja de pollo frito? En casa por supuesto que no. ¡Nos encanta! Un pequeño trozo de pollo crujiente y sabroso. El mejor de los consejos es que tengamos el pollo macerando el mayor tiempo posible, sólo así tendremos un pollo lleno de sabor. Nuestro aderezo muy simple: ajo, limón y perejil. Todo ello bien triturado será el aderezo perfecto.
Un buen aceite de oliva virgen extra para freír estos trozos de pollo que pasamos previamente por harina. Un verdadero manjar.
Y tú, ¿te animas con este pollo frito? Pues toma nota que comenzamos.
- 1 pollo pequeño troceado o 4 cuartos traseros troceados
- 8 dientes de ajos
- 1 limón grande
- Perejil fresco
- Sal
- Pimienta molida
- Harina
- Aceite de oliva virgen extra
- Ponemos el pollo troceado, en trozos pequeños para que se hagan bien por dentro, en una fuente grande.
- Ponemos en el vaso de la batidora los ajos pelados y picados junto con el zumo del limón y el perejil fresco. Agregamos un vaso pequeño de agua. Trituramos todo muy bien.
- Pasamos la mezcla triturada al pollo y mezclamos para que todo el pollo se impregne.
- Salpimentamos y volvemos a mezclar.
- Dejamos reposar mínimo 2 horas pero a más tiempo, más rico. De vez en cuando podemos remover para que todo el pollo se impregne bien con el aderezo.
- Pasamos los trozos de pollo por harina y sacudimos para que pierda el exceso de harina.
- Freímos en abundante aceite de oliva virgen extra.
- Pasamos a papel absorbente para que el exceso de aceite lo pierda.
- Servimos.