Tarta de queso y galletas lotus
Deliciosa tarta la que os traigo hoy que cuando me di cuenta, ya la habíamos repartido así que solo pude echar esta foto. De esos días que vas a mil por horas y me despisté. La tarta os la podéis imaginar, así como os podéis imaginar lo deliciosa que estaba. Una tarta que no necesita horno, que solo necesita tiempo en frío para que cuaje bien. Lo ideal es hacerla de un día para otro.
Y tú, ¿Te animas con esta Tarta de queso y galletas lotus ? Pues toma nota que comenzamos.
- Para la base: 125 gr de galletas tipo Lotus
- 50 gr de mantequilla
- Para el relleno 200 gr de nata para montar
- 75 gr de galletas lotus
- 150 gr de queso en crema
- 50 gr de azúcar
- 1 sobre de cuajada
- 25 gramos de leche
- Para la cobertura ½ vaso de agua
- 100 gr de azúcar
- Unas gotitas de zumo de limón
- 1 cucharada de maizena
- 2 huevos
- 10 gramos de mantequilla
- Trituramos las galletas de la base y la mezclamos con la mantequilla derretida.
- Forramos la base de un molde de aro desmontable. Reservamos.
- Troceamos las galletas del relleno.
- Ponemos en un cazo la nata y el azúcar.
- Mezclamos.
- Cuando comience a hervir, añadimos el queso.
- Removemos bien para que se integre el queso en la nata.
- Ligamos el sobre de cuajada en la leche y añadimos al cazo, sin dejar de remover.
- Cuando la mezcla empiece a hervir, retiramos del fuego. No dejamos de remover porque aún está caliente. Cuando se haya atemperado un poco, incorporamos las galletas troceadas que tenemos preparada. Mezclamos.
- Pasamos la mezcla al molde, con cuidado y dejamos que se enfríe primero y luego pasamos al frigorífico, al menos 6 horas, 10 mucho mejor.
- Para hacer la cobertura ponemos el agua con el azúcar en el fuego.
- Agregamos unas gotitas de zumo del limón.
- Batimos los huevos con la maizena y la leche.
- Agregamos al azúcar derretido que ya lo tenemos como almíbar, la mezcla que hemos preparado y removemos con unas varillas hasta que espese bien.
- Dejamos que se temple un poco la crema.
- Ponemos la crema templada sobre la tarta cuando esté totalmente cuajada.
- Regresamos al frigorífico.
- A la hora de servir, desmoldamos y troceamos.