Guiso de salmón con patatas
No estamos en época de bonito del Norte. Se ponga como se ponga el pescadero, que te pretende colar el atún o el bonito de no sé dónde, congelado, por el sabroso bonito del Cantábrico. Desgraciadamente, aún falta mucho para que volvamos a tener en las pescaderías este pescado de verano.
A mi me gusta mucho el marmitaco y ese guiso de bonito con patatas, que en Cantabria también llaman “marmita”, junto con el bonito con tomate, es un plato que pongo mucho en casa, cuando es temporada.
Pues ese plato -u otro muy parecido-, también lo podemos hacer ahora, en pleno invierno, sustituyendo el bonito por salmón.
El plato resulta igualmente muy fácil de elaborar, muy fácil de recalentar -incluso gana cuando se toma de un día para otro- y muy nutritivo.
Digamos que, a falta del esperado bonito, este marmitaco es un second best muy, pero que muy presentable. Ya vendrán tiempos mejores, pero ahí queda la idea para comidas y cenas invernales.
- 250 gr. de salmón fresco sin piel ni espinas, cortado en tacos
- ½ cebolla
- 4 patatas medianas
- 3 pimientos verdes
- 3 o 4 cucharadas de tomate frito
- 1 vasito de vino blanco
- 1 vaso de agua o de caldo de pescado
- laurel, aceite de oliva, sal y pimienta
- Se pelan las patatas y se cortan en cuadrado no muy pequeños (mejor escachándolas)
- Se pica la cebolla y el pimiento no muy menudo.
- En una cazuela se pone un poco de aceite al fuego y se va rehogando la cebolla, los pimientos, el laurel, el tomate y la patata. Se da una vuelta todo junto y se agrega el lvino blanco, y el agua. Se deja cocer a fuego medio y, cuando las patatas ya están casi tiernas, se agregan los trozos de salmón. Se salpimenta a gusto.
- Se deja que dé todo junto un hervor y se retira del fuego . Este plato está mejor si se deja reposar unas dos horas.