Patatas con pimientos y nata
Me gusta de vez en cuando presentaros un acompañamiento.
De vez en cuando todos preparamos en casa platos a la plancha, carne o pollo son los que más ponemos al menos en mi casa, si estas preparaciones sencillas las servimos con un acompañamiento muy especial lo convertimos en un menú especial.
Hoy iba a poner de comida pechugas de pollo a la plancha acompañadas de patatas, me acorde que este plato hacia mucho que no lo preparaba y me dispuse a realizarlo, como veréis se convirtió en un plato único, pechuga de pollo con patatas con nata me pareció suficiente para no cocinar nada más.
En otras ocasiones he realizado esta receta solo con nata, pero la verdad es que me gusta suavizar un poco la nata y ponerle un poco de leche, pero si os gusta el sabor de la nata podéis suprimir la leche y ponerle solo nata.
Es importante que el plato lo realicéis a fuego muy lento, ya que si el fuego es fuerte al hervir se nos irá por fuera como siempre pasa con la leche, además tenemos el peligro de que se nos pegue, prepararlo con tiempo y a fuego muy suave, os quedara delicioso.
- 400 gr. patatas
- 125 ml. nata liquida
- 100 ml. leche entera
- 75 gr. cebolleta
- 100 gr, pimiento rojo
- Sal
- Aceite oliva
- Pimienta cinco bayas
- Pelar las patatas y cortarlas en rodajas un poco gruesas.
- Cortar la cebolleta en rodajas y el pimiento rojo en trozos.
- En una sartén con un poco de aceite poner la cebolla, sofreír un rato y añadir las patatas, juntar todo y a continuación los pimientos, sofreír todo un poco más.
- Añadir la nata, la lecha, sal y un poco de pimienta.
- Dejar cocinarse a fuego lento hasta que las patatas estén blandas.