¿Cuántas veces habéis terminado una cena con amigos o con vuestra pareja, y aunque no os apetece tomar postre, siempre os queda la sensación de que os falta algo de dulce? Seguro que muchas.
Por eso hoy, a diferencia de los cócteles que suelo traeros normalmente, quiero ofreceros algo mucho más especial. Se trata del delirio noctámbulo. Curioso nombre, ¿verdad?
Amantes del dulce… ¡estáis de enhorabuena! Porque este es, sin duda alguna, vuestro cóctel. Pero una advertencia, todos aquellos que no estéis dispuestos a tomar más calorías que las estrictamente necesarias, ya podéis olvidaros de probar este impresionante cóctel, pero… pensároslo muy seriamente. ¿Acaso no viene mal darse algún que otro capricho de vez en cuando?
Podéis valeros de este cóctel como postre, después de comer, durante la sobremesa, o mientras disfrutáis de una charla en una reunión de amigos.
Los que sí os puedo asegurar es que este cóctel no dejará a nadie indiferente.
Mi nombre es Margarita Gibson y te presento un blog repleto de los secretos mejor guardados de los bármanes de todo el mundo. Acompáñame y te enseñaré a preparar cócteles venidos de los cinco continentes, desde un daiquiri cubano hasta un pisco sour de Perú. Tú también puedes ser un maestro de la coctelería. ¿Te atreves?
[…] galletas se han convertido, hasta el momento al menos, en mis galletas favoritas. Ya sea para merienda o desayuno, ¡están súper […]