Tarta de Santiago
Hola a todos/as. Mi nombre es Nuria Nuñez y hoy inauguro este blog en el que quiero enseñaros todo lo que sé sobre una de mis grandes pasiones: la repostería y, en especial, las tartas. A partir de este momento compartiré las recetas de esas tartas que, por algo concreto, han sido especiales para mi. Si queréis descubrir otras muchas recetas, os invito también a pasar por mi blog personal Mil Tartas, donde encontraréis multitud de tartas para todos los gustos.
Y comenzaré esta sección de tartas especiales con una que, a su vez, servirá de homenaje a la persona a la que debo gran parte de lo que se y que consiguió que los pasteles me apasionaran tanto como a ella. Me refiero a mi madre y a su Tarta de Santiago, que me acompañó en algunos cumpleaños de mi niñez. Ella la preparaba de forma totalmente artesanal, en casa y con todo su amor. Por esto mismo es una receta tan especial para mí, además de deliciosa y muy popular.
- 5 huevos
- 250 gr. de azúcar
- 250 gr. de almendras molidas
- 1 cucharada de canela
- 20 gr. de ralladura de limón
- 75 gr. de azúcar glass
- Molde redondo de 20-22 cm. y papel para horno
- Plantilla de la Cruz de Santiago en cartulina
- Introducimos el azúcar y las almendras en un bol.
- A continuación se irán añadiendo los huevos. Habremos de hacerlo uno a uno, despacio, vamos batiendo la mezcla a mano o con una batidora de varillas.
- Una vez bien batida la masa con todos los huevos se le agregará la ralladura de limón y la canela mientras no dejamos de batir
- Pondremos nuestro horno a precalentar hasta que alcance la temperatura de 180ª y lo configuramos con fuentes de calor superior e inferior.
- Forramos el molde con el papel especial para horno y verteremos la masa en el interior.
- Se introduce a hornear durante 30 minutos.
- Comprueba que la masa se ha cocinado introduciendo un palillo de dientes. Al sacarlo debe estar completamente seco. Si sale húmedo déjala en el horno 5 minutos más.
- Una vez que compruebes que la masa esté completamente cocinada, retírala del horno y deja reposar durante 15 minutos.
- Saca la tarta del molde, déjala en un plato o bandeja y coloca la plantilla de la Cruz de Santiago encima de ella
- Espolvorea toda la superficie con azúcar glass hasta que quede cubierta por completo. Retira cuidadosamente la plantilla para que no se estropee el dibujo generado.
- Deja reposar de nuevo, esta vez durante una hora y después estará lista para servir.